En la zona del mar que separa las islas de Mallorca y Menorca, archipiélago belear español, un equipo de investigadores desde el Centre d’Estudis Avançats de Blanes (CEAB), en conjunto a otra entidades científicas locales, detectaron unos 752 millones de partículas de plástico flotando.
Durante los años 2014 y 2015, se realizó un muestreado trimestral en el Canal de Menorca que permitió medir la presencia de estos microplásticos, y todos estos en un conjunto alcanzan la suma de 3,7 toneladas.
Según indica el estudio realizado, por Luis F. Ruiz-Orejón, científico del CEAB y miembro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), las mayores concentraciones de material plástico se detectaron en primavera y en verano, en áreas próximas a Mallorca.
Esto deja a entre veer que puede ser producido por la actividad turística, y además el científico del CEAB explica que, "aunque las corrientes y el oleaje son mecanismos de limpieza muy efectivos en ciertos periodos del año, las partículas no desaparecen o se reducen; simplemente se desplazan de unas áreas a otras".
Con el objetivo de "aumentar la visibilidad sobre distintas problemáticas que hoy día sufre el Mar Mediterráneo", el trabajo fue posible gracias a investigaciones cursadas en el marco del Proyecto Nixe III.